Las desventuras económicas que sufren los hermanos Sosa frente a la estafa de su archirrival Laureano Gómez Acuña –y que desvelan al público– poco tienen que ver con la bonanza que sus intérpretes gozan por estos días. Luciano Castro, Mariano Martínez, Gonzalo Heredia y hasta Alejandro “Huevo” Müller no sólo disfrutan de las mieles del éxito expresado en racimos de fans que los acosan y mujeres que caen rendidas a sus pies (aunque Mariano Martínez es casado y esté retirado del mercado de la seducción). Esa popularidad se expresa en billetes constantes y sonantes.
Para la ficción diaria, Luciano Castro y Mariano Martínez tienen un cachet aproximado de 75 mil pesos mensuales; Gonzalo Heredia comenzó con 40 mil y luego lo incrementó. Es que “Valientes” fue la apuesta que salió bien, un experimento para una nueva manera de hacer tele, en la que se prescinde de primerísimas figuras (Pablo Echarri o Facundo Arana cobran más de 150 mil pesos por mes) y se opta por nuevos talentos.

La historia de los Sosa cautivó al público desde un principio, y prácticamente no bajó de los 30 puntos de rating diarios, lo que convirtió a la novela en la tarifa más alta para pautar publicidad en televisión abierta. Cada segundo en “Valientes” sale 5 mil pesos.

Tan así fue el éxito de la tira que Adrián Suar y Fernando Blanco contrataron a los actores de la tira para transplantar el éxito televisivo al teatro. Y funcionó.

Los tres acordaron un suculento seguro para un improbable fracaso y, además, –lógico– arreglaron ir a puntos de taquilla. Los protagonistas van al 10 por ciento del borderó. El precio de las entradas es de 100 pesos, independientemente de la localidad que toque, por lo tanto hay colas en boletería desde las 8 de la mañana. Debido a la intensa demanda, la obra se realizó dos veces por día, de martes a domingo a las 21 y a las 23, con un promedio de 800 espectadores diarios en un teatro (el América) con capacidad para 900 butacas. Las cifras oficiales de espectadores aún no se dieron a conocer, pero los números relativos hablan de que se superaron las 40 mil entradas vendidas. Un simple cálculo arroja que la facturación fue de aproximadamente 4 millones de pesos, y que cada “Valiente” se llevó de la temporada veraniega 400 mil pesos por cabeza.

Pero eso no es todo. El reclamo de los fans se hizo oír, entonces la obra iniciará una gira por el interior del país. En Rosario harán dos fechas el próximo 6 y 7 de marzo; será en el salón Metropolitano del Shopping Alto Rosario, con capacidad para 2.628 personas. En Córdoba se presentarán en el Superdomo Orfeo el fin de semana siguiente, con capacidad para 3.029 personas. El sábado 20 y domingo 21 de marzo actuarán en el Club Estudiantes de Bahía Blanca, con capacidad para 2.500 personas. El último fin de semana de marzo lo harán en el Auditorio Ángel Bustelo de Mendoza, con 1.958 butacas. El resultado de la gira es de aproximadamente 20 mil espectadores más que se suman al éxito arrollador de la ficción. Hablando en plata, 200 mil pesos por cabeza.

Vida de Beatle. El elenco de la obra se alojó en Torres de Manantiales. Custodiados por un ejército de guardaespaldas, todos los días a las seis de la tarde una combi los pasaba a buscar por el complejo para trasladarlos al teatro. Allí eran recibidos por un cordón policial que intentaba protegerlos de las fanáticas, muchas de ellas con doce horas de espera para ver a sus ídolos. Es que la boletería abría a las 10, pero dos horas antes, a las 8, la fila de espectadores ya daba vuelta a la manzana.

Entre función y función ordenaron un catering de restaurante, ya que en un principio no estuvieron de acuerdo con la comida que les ofrecían. La consideraron escasa y más digna de un lunch que de una buena cena.

Poco afectos a la vida social, sus salidas se limitaron a la playa. En el caso de Mariano Martínez aún menos, dado que su hija Olivia tiene apenas 3 meses y no puede exponerse a los rayos del sol. Quien sí disfrutó de su fama fue Alejandro Müller, a quien se lo vio todas las noches en el boliche INK, muchas de ellas bien acompañado. Las salidas de “Huevo” fueron motivo de cargada entre sus compañeros, que demostraron así la buena onda reinante en el elenco. “Prefiero que me carguen por salir y no quedarme encerrado todo el día abrumado por la fama”, respondía él a los chistes de los galanes.

Se sabe, con la fama llegan las buenas ofertas. Tanto es así que las marcas pugnaron con fuerza para contratar a los galanes del verano para que posen en sus banners playeros y publicitar así sus productos. El mercado de la imagen les deja altos dividendos a los famosos, que no tienen más que sonreír delante de un cartón con una marca.

El cachet de los jóvenes para prestar su imagen no baja de los 10 mil pesos, salvo en el caso de Luciano Castro, quien ofrece rotundas negativas cuando intentan contratarlo para estas acciones. Pero siempre hay una excepción, y la de esta temporada fue la de la marca de telefonía celular Claro, que organizó un partido de fútbol. Para contar con la presencia de los “Valientes” desembolsó 20 mil pesos por cabeza para los galanes y 15 mil para “Huevo”. En este caso, Castro concurrió porque además del efectivo, la propuesta incluía deporte, una de las actividades favoritas del grandote.

Tanta es la buena onda entre el trío que se asesoran mutuamente a la hora de negociar contratos, aunque a comienzos de temporada se corrió el rumor de que Martínez había reclamado más plata que sus compañeros. Lo que sí es cierto es que Mariano rompió relación con su mánager, Diego Farell; Luciano Castro y Alejandro Müller también se maneja en forma independiente. Los tres intentan aconsejar a Heredia sobre las ventajas de manejarse solos en el mercado de la farándula, pero el de Munro aún permanece en las huestes de Alejandro Vanelli, su mánager. Al menos por ahora.

En una entrevista, Adrián Suar consideró a “Valientes” como el éxito más grande de su carrera. Los números de rating abrazaron a sus protagonistas desde el día uno. Los billetes también.